¿Qué es el tramex?
Llamamos “tramex” a un tipo de rejilla rígida y ligera de uso industrial (y hasta hace poco fabricada casi únicamente en metal) que también puede recibir el nombre de “entramado” o “emparrillado”. Este tipo de estructura ofrece una superficie muy resistente y estable gracias al uso de unas pletinas que se encargan de absorber la carga, por lo que sus usos son muy variados y entre ellos se encuentran: la instalación de vallas, de falsos techos, de pasarelas, de suelos…y mucho más.
Es decir, que el tramex es algo muy habitual en el mundo de la soldadura metálica, sin embargo, hoy en día, y ante la cada vez más extendida fabricación de tramex plástico y rejillas PRFV, surgen algunas dudas, como cuál es el material más adecuado para grandes cargas o si realmente el tramex de plástico y las rejillas PRFV pueden llegar a suportar la misma cantidad de peso que el acero. Pero antes de despejar ese tipo de dudas, veamos algo más sobre el tramex de plástico y de metal y las rejillas PRFV.
¿Qué es un tramex o rejilla PRFV y qué beneficios tiene?
Hablamos de rejilla PRFV cuando nos referimos a aquellas rejillas fabricadas con plástico reforzado con fibra de vidrio. La fibra de vidrio es la encargada de aportar al plástico un mayor grado de resistencia a la compresión y a la tensión de las cargas, lo cual es algo muy demandado hoy en día, puesto que el material evita además factores tan importantes como el de la corrosión. Los tramex plástico no son tan conocidos como los traficionales tramex metálicos, pero su distribución y empleo se están generalizando gracias a algunas ventajas que presentan frente al tramex metálico como son la ausencia de corrosión en el tramex plástico.
Este tipo de rejillas PRFV suelen fabricarse en una sola pieza tipo cuadrícula, lo que hace que el peso se distribuya de una forma mucho más equitativa y eficiente, lo cual es fundamental para el transporte de materias primas o grandes cargas. Además, también ofrecen un mayor nivel de estabilidad en la pisada, pues al hacerse con grano gordo plástico, se reducen las posibilidades de resbalones.
Es decir, que este tipo de rejillas aportan un gran nivel de seguridad a muchas empresas, y no solo con respecto a las cargas y el trabajo de los empleados, sino también con respecto a la eliminación de los accidentes químicos producidos por la corrosión o a la nula conducción de corrientes eléctricas y presencia de campos magnéticos en el material.
¿Qué es un tramex o rejilla de metal y qué beneficios tiene?
Un tramex o rejilla de metal puede fabricarse de diferentes tipos, como por ejemplo de aluminio o de acero inoxidable, y es un tipo de estructura que ofrece resistencia, seguridad y un alto grado de soporte. Esto quiere decir que en el mundo del tramex metálico hay bastantes más opciones que en el plástico, siendo las fabricadas en aluminio una buena opción para resistir niveles altos de humedad y tener una gran durabilidad, o las de acero inoxidable para luchar contra la oxidación.
El uso del tramex metálico siempre ha sido muy demandado en todo tipo de fabricaciones de tipo industrial, pero también en construcciones y diseños de alto nivel estético, por lo que sigue siendo una opción muy buena para muchos proyectos, como para la construcción de muchas fachadas o balcones y barandillas.
¿Cuál es entonces la rejilla más resistente, la de plástico o la de metal?
Podríamos decir que ambas tienen casi el mismo nivel de resistencia a las cargas, aunque es cierto que en el caso de la rejilla PRFV puede que sea algo mayor, y con la ventaja añadida de tener también la mitad de peso que una rejilla de acero, por ejemplo. Además la rejilla de PRFV es más elástica y flexible, lo que es sin duda la mayor ventaja de la rejilla en este material, pues esto también ayuda al aumento de su durabilidad y al mantenimiento de su planicidad.
Pero en cualquier caso, y elijamos la que elijamos, en cuanto a la resistencia se refiere debemos tener en cuenta que cuando hablamos de tramex (ya sea de plástico o de metal) deberemos tener siempre presente la distancia entre la altura de la rejilla y los apoyos, pues es de lo que dependerá realmente la resistencia a una carga mayor o menor. A una mayor altura y una menor distancia entre los apoyos, obtendremos una mayor resistencia y viceversa.